lunes, 11 de mayo de 2015

Introducción

MUSEOS DE QUITO


Quito, formalmente San Francisco de Quito, es la capital de la República del Ecuador y de la Provincia de Pichincha con 1603637 de habitantes, es la segunda ciudad mas poblada el Ecuador. Además es cabecera cantonal del Distrito Metropolitano de Quito, Actualmente es considerada como la capital económica del país. 

Quito forma parte de la Hoya de Guayllabamba, localizada en las faldas orientales del volcán Pichincha. Y a pesar de su considerable altura (la capital mas alta después de La Paz) su clima es primaveral y soleado la mayor parte del año por su cercanía al paralelo 0º, exactamente a 40 minutos desde la zona comercial de la ciudad.

Además posee también el Centro Histórico más representativo del Ecuador y el más grande de América Latina, conformado por un extenso casco colonial que incluye variedad de iglesias, capillas, monasterios y conventos, así como plazas, museos, casonas antiguas, edificaciones republicanas y de inicios del siglo XX, además de obras contemporáneas imponentes.

Por toda esta riqueza natural, geográfica, arquitectónica, cultural y estética, la UNESCO reconoció universalmente a la Capital del Ecuador, como Primer Patrimonio Cultural de la Humanidad en noviembre de 1978.



De acuerdo a la UNESCO se establecen las siguientes categorías:

BELLAS ARTES
Presenta obras de arte realizadas desde la antigüedad hasta el siglo XIX. Desde 2002, esta categoría abarca el arte sacro, de modo que los museos vinculados a conventos quiteños caben en esta clasificación.

ARTE CONTEMPORÁNEO
Incluye obras de arte realizadas en los siglos XX y XXI. En esta publicación abarca la Quinta Soledad de Eduardo Kingman, la Capilla del Hombre entre otros espacios de importantes pintores contemporáneos.


ESPECIALIZADO 
Profundiza en una parcela del patrimonio cultural, como por ejemplo Yaku, Museo del Agua, dedicado a explorar el agua como fuente de cultura.


GENERAL
Museo o colección que puede identificarse por más de una de las categorías anteriores. Dentro de esta categoría se ubica, por ejemplo, el Museo del Banco Central del Ecuador que ofrece arqueología, bellas artes y arte contemporáneo.


HISTÓRICO
Esta categoría incluye museos y colecciones que ilustran acontecimientos o periodos históricos, personalidades de la historia, museos militares, etc.


MUSEO DE SITIO
Comprende bienes históricos como yacimientos arqueológicos o monumentos convertidos en museos en el mismo lugar para el que fueron concebidos originariamente. El caso más representativo es el Parque Arqueológico y de Investigación Científica Cochasquí.


CASA - MUSEO 
Museo ubicado en la casa natal o residencia de un personaje.


ARQUEOLÓGICO
Contiene objetos portadores de valores históricos y/o artísticos, procedentes de excavaciones, prospecciones y hallazgos arqueológicos.


ANTROPOLOGÍA
Se dedica a culturas o elementos culturales preindustriales contemporáneos o pertenecientes a un pasado reciente. Debido a que esta categoría incluye los museos de folklore, artes, tradiciones y costumbres populares, hemos listados en ella a las tiendas museo que combinan arqueología y piezas artesanales contemporáneas como el Museo Amazónico.


CIENCIAS
Colecciones relacionadas con la biología, botánica, geología, zoología, antropología física, paleontología, mineralogía, ecología, etc y objetos representativos de la evolución  de la historia de la ciencia y de la técnica. 


MONUMENTOS




Museo Arqueológico Antonio Santiana


MUSEO ARQUEOLÓGICO ANTONIO SANTIANA 


Ubicación 
Universidad Central - Facultad de Filosofía - Av. América

Horario de atención 
Lunes a viernes 08:00 / 17:00

Costo de ingreso 
Adultos $1,00
Estudiantes $0,50

El Museo Antropológico de la Universidad Central exhibe una muestra de 12 mil años de cultura aborigen. Fue creado en 1925 como museo Arqueológico Nacional con valiosas piezas arqueológicas y de historia natural. Desafortunadamente, en el incendio de la vieja casona, ocurrido el 9 de noviembre de 1929, se perdieron muchas piezas. El año 1959 se incorporó a la colección original una muestra de cráneos y objetos indígenas contemporáneos, con lo cual adquirió el carácter en museo antropológico y etnográfico, bajo la dirección del doctor Antonio Santiana, que hizo importantes contribuciones a la antropología física y cultural.
Desde hace varias décadas el museo forma parte de la Facultad de Filosofía, Letras y Ciencias de la Educación. El año 2010 el museo fue reabierto con un nuevo diseño museográfico y una concepción museológica antropocéntrica. Según el testimonio del actual director, el Museo Antropológico Antonio Santiana “Guarda una colección arqueológica de 1300 piezas y resalta la figura humana, plasmada en esculturas y artefactos utilitarios y rituales, inspirados en personajes reales que hablan no solo de un antropormorfismo sino también de un antropocentrismo de los pueblos prehispánicos.
El viejo museo exhibe un atractivo diseño en el que se combinan murales, dioramas, textos explicativos y 27 vitrinas con valiosas piezas de las colecciones que pertenecieron a Jacinto Jijón y Caamaño, Federico González Suárez, Max Uhle y Antonio Santiana.
La concepción teórica del museo de la Universidad Central contribuye a desvanecer el mito de América como el continente inferior y sin memoria histórica, y a desmitificar la vieja tesis eurocentrista de la inferioridad de los pueblos americanos. Ante esa percepción “deformada y ahistórica se redescubre a nuestros pueblos y a su proceso de su evolución cultural, en el tránsito de primitivas formas comunitarias hacia formas pluriclasistas de división del trabajo, lo cual se expresa en el desarrollo de múltiples ámbitos del saber y el hacer, como en la cerámica, la  agricultura, la construcción de viviendas, caminos, embarcaciones, monumentos ceremoniales, textilería, orfebrería, platería, medicina. Se destaca el uso y conservación del suelo y del agua, mediante los cultivos en terrazas y la construcción de canales de riego; el conocimiento de la flora y fauna nativas, y la sabia utilización de las plantas medicinales… para la satisfacción de sus necesidades básicas: alimentación, vivienda, vestuario, comunicación, fabricación de  herramientas y objetos ceremoniales…” (2)
El museo Antropológico de la Universidad Central guarda importantes testimonios materiales de las principales culturas precolombinas del Ecuador y con ello se recrea la verdadera historia aborigen. Expresa Plutarco Naranjo en el estudio introductoria al libro El Pan de América: “Cuando los españoles descubrieron América -esto lo atestigua el propio Colón en su diario y sus cartas a los Reyes Católicos-, encontraron un pueblo saludable, de gentes robustas y singular belleza… Mientras fueron señores de sus tierras, los aborígenes de América gozaron de una alimentación variada y balanceada. Desarrollaron técnicas agrícolas que les permitía gozar de buena alimentación y nutrición. La conquista implicó una profunda alteración en sus patrones alimentarios… pasó a una dieta limitada y monótona. América tanto en su parte tropical como en su área andina fue un importante centro de domesticación de plantas y de desarrollo de nuevos cultivos, algunos de los cuales, ahora sabemos son de muy alto valor alimenticio: la quinua, el chocho, los amarantos.
En bien logrados dioramas e ilustraciones el museo presenta secuencias históricas de la evolución cultural de los pueblos que habitaron la Costa, la Sierra y Amazonía de lo que ahora es el territorio ecuatoriano.La historia oficial destacó las hazañas de los conquistadores pero ocultó la verdadera historia y cultura de los pueblos americanos, las técnicas para enfrentar los
problemas de sobrevivencia y reproducción social y los conocimientos protocientíficos del mundo físico y del mundo viviente. Hace cinco siglos se edificó el mito del continente inferior y sin memoria para  justificar la explotación y el genocidio colonial; luego se pretendió levantar el mito del fin de la historia para imponer el pensamiento hegemónico y la política de dominación global. El Museo Antropológico de la Universidad Central contribuye a desterrar mitos y prejuicios, aporta al fortalecimiento de la conciencia social de nuestro pasado que nos enorgullece y afirma como un pueblo dueño de una larga historia, con la cual todos los ecuatorianos debemos identificamos

Museo de Zoología QCAZ



MUSEO DE ZOOLOGÍA QCAZ




El Museo de Zoología de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador, identificado mediante su acrónimo QCAZ (Quito-Católica-Zoología) es reconocido a nivel nacional e internacional por sus colecciones biológicas, su personal de alto nivel académico y por las investigaciones que en él se realizan. El QCAZ posee cerca de medio millón de especímenes lo cual lo posiciona como la colección de fauna más grande del Ecuador. La colección está formada principalmente por especímenes ecuatorianos e incluye numerosos especímenes tipo. Los especímenes están disponibles para intercambio y préstamo en concordancia con la legislación ecuatoriana y según normas museológicas. El QCAZ está adscrito administrativamente a la Escuela de Biología de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales.

Como uno de los museos más importantes del mundo y como parte de la comunidad universitaria estamos en el corazón de la sociedad y trabajamos colectivamente, con principios éticos y al más alto nivel académico, para generar conceptos y ejecutar acciones para un mejor entendimiento, apreciación, y conservación de la vida animal.


Como una comunidad académica ejecutamos y apoyamos investigaciones zoológicas; educamos mediante la docencia y exposiciones públicas y salvaguardamos de modo permanente muestras representativas de la fauna.

Cada sección aloja un conjunto de ejemplares zoológicos, etiquetados y registrados en los archivos correspondientes, ordenados taxonómicamente, y preservados y protegidos según estándares museológicos. Cada sección tiene laboratorios de investigación y personal asociados. El museo también cuenta con uno de los bancos de genoma animal más grandes de Latinoamérica.

La Sección de invertebrados del Museo de Zoología QCAZ adscrita a la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador, es uno de los centros de investigación básica y aplicada más importantes de nuestro país. 
La sección conserva una colección con más de 2’000.000 de invertebrados siendo uno de los referentes más completos de la fauna ecuatoriana científicamente avalada. Alrededor de 20 personas, entre docentes, investigadores, técnicos y estudiantes, trabajan en la recolección, preparación, preservación y estudio de los invertebrados.  Se realizan inventarios, identificaciones taxonómicas, estudios de ecología, conservación, genética evolutiva, biogeografía, ecología de ríos, fisiología, modelamiento ecológico y manejo integrado de plagas agrícolas. Estos estudios son puestos a disposición de la comunidad a través de publicaciones y constituyen herramientas básicas para el desarrollo de políticas ambientales sustentables, planes de conservación de bosques y ecosistemas acuáticos y control biológico de plagas.


Taller Escuela Quiteña


TALLER ESCUELA QUITEÑA

Los oficios tradicionales de Quito resurgen de la mano de artesanos especializados que comparten sus experiencias con los turistas que visitan los viernes el barrio de La Ronda, en el centro de Quito.
La casa 989 de este sector tradicional del Centro Histórico acoge a artesanosque estudiaron y perfeccionaron la técnica de la Escuela Quiteña y que ahora realizan a mano objetos en madera y metal, restauración de cosas antiguas.
La Escuela Quiteña es el conjunto de manifestaciones artísticas que  surgió durante la época de la Colonia y que tuvo varios campos de acción en torno a la elaboración de artesanías. “Nosotros estudiamos en la Escuela de Artes de Quito, que desapareció y ahora formamos la Escuela Quiteña, en la que realizamos objetos nuevos, pero bajo estas técnicas o las de envejecimiento”, sostiene José Luis Jiménez, artesano especialista en taracea (incrustaciones de madera).
Todo se lo hace de forma manual, siguiendo las técnicas usadas por los precursores de esta tendencia. Jiménez se dedica a la elaboración de bargueños (mueble con cajones  secretos), marcos para  cuadros al  estilo colonial, restauración de objetos de  madera, entre otros.
Afirma que “es el rescate de una tradición quiteña muy importante como son los oficios, la elaboración de productos de manera artesanal y con técnicas laboriosas, pero que perduran en el tiempo y que son elaborados bajo la rigurosidad de la tradición”.
Si bien la propuesta del proyecto “Manos a la Ronda” es que los artesanos realicen sus actividades en la calle, debido a la debilidad de la madera frente al sol, los artesanos de la Escuela Quiteña permanecen  en sus talleres, pero reciben continuamente visitas de los turistas que  acuden a La Ronda.
Claire Bousso, turista francesa, se mostró  sorprendida por la habilidad  de los artesanos. “Es difícil creer que todavía existan personas con tal  habilidad para darle forma a una madera o un metal y que sean verdaderas  obras de arte”, destacó la visitante.
Bousso también comentó que “en Europa todos los procesos son automatizados y muy pocas personas  hacen trabajos a mano, porque mientras ellos hacen uno la máquina puede hacer 100 similares, pero de  menor calidad”.
José Salazar, especialista en la forja artística, señala que “los turistas pueden ver cómo se hacen las diferentes piezas, cómo es el proceso y además aprenden a diferenciar entre un objeto antiguo y uno nuevo, pero sometido a procesos de envejecimiento”.
Si les gustan compran esos objetos, pero lo importante es compartir con los visitantes para que observen  en vivo el proceso creativo que realizan los maestros.
Tanto Salazar como Jiménez destacan que el objetivo es mantener viva la tradición de los oficios quiteños, que en años anteriores estuvieron a punto de desaparecer. “Nosotros aprendimos de los maestros, de las personas que realizaron  toda su vida estas actividades, de quienes  saben los secretos de su arte y que  nos enseñaron”, destacó José Luis Jiménez.
Las personas que acudan a esta exposición podrán observar la elaboración de candados de hierro, candelabros, figuras de madera, consolas, retratos e  incluso bocetos de nuevos proyectos en los que están trabajando continuamente y que son una novedad entre los turistas.
Los talleres abren sus puertas al público solo los viernes, a partir de las 10:00, con la finalidad de atraer a los visitantes.

Museo del Tren de Chimbacalle


MUSEO DEL TREN DE CHIMBACALLE 


Ubicación
Barrio de Chimbacalle, calles Quilotoa y Sangay

Horario de Atención
Jueves a domingo después de que los pasajeros suban a los trenes, alrededor de las 8:00 am.

Costo de ingreso 
Entrada libre 

La estación del tren en Chimbacalle es una de las 7 maravillas de Quito, de aquí parten los trenes rumbo a Machachi, Boliche o Latacunga  y aunque es solo una estación, es un lugar muy entretenido para los pequeños que pueden ver a los trenes partir, subirse a una vieja locomotora, desayunar, visitar el museo y  jugar en los juegos infantiles.
Para que los más pequeños de la casa entiendan cómo funciona el tren y el proceso de construcción de sus vías, este museo cuenta con una zona de experimentos en la que se puede recordar cómo es ser niño. Visita este museo y como de una manera divertida qué es el efecto Doppler, un poco sobre la cultura, costumbres y tradiciones de cada una de las comunidades donde está ubicada la estación.
La estación es hogar de la vieja locomotora que fue usada durante la inauguración hace un par de años, donde puedes subir a los chiquitos para que jueguen al tren, o para tomarte fotos.
El Museo del Tren Chimbacalle cuenta la historia de este hermoso medio de transporte de una manera muy singular, está Ubicado en Quilotoa y Sangay, cerca de la estación Chimbacalle del trole.
Al visitar la estación para viajar en tren se puede ingresar a este museo y conocer como los trajes de buzo, las sumadoras, artículos de medición y los extintores fueron una parte necesaria para el recorrido del ferrocarril.
También se encuentra una réplica a escala de la vía que recorre esta imponente máquina liderada por la locomotora rojo – negro que al pasar hace sonar su silbato. La maqueta tiene una base de balastro, rieles y durmientes que hacen que luzca todavía más real, y para agregar más detalles se puede ver un pequeño coche de mano y elementos de mantenimiento necesarios para cuidarlo.
Ademas la estación tiene un buen restaurante “El Cafe del Tren” donde puedes tomarte un buen desayuno.  Después si son suficientemente grandes y les interesa puedes visitar el museo del tren o simplemente llevarlos al área de juegos infantiles para que corran y jueguen.



Teatro Bolívar


TEATRO BOLÍVAR 


Ubicación 
Calles Flores y Espejo 

A inicios de la década de 1930 el Ecuador intenta recuperarse de la aguda crisis económica y política por la que había atravesado años antes. Aunque las exportaciones de cacao continúan deprimidas, sobre todo en cuanto a sus precios, el incremento de las inversiones extranjeras y la presencia del ferrocarril desde el puerto de Guayaquil influyen en el ambiente quiteño otorgándole a la ciudad aires de modernidad, con nuevos movimientos culturales y artísticos.

Los señores Carlos y César Mantilla propietarios del diario El Comercio, importante medio de Comunicación de la ciudad, deciden construir una gran sala de cine para contribuir al desarrollo cultural de la urbe. Contratan entonces a la firma Hoflman & Henon, célebres arquitectos e ingenieros norteamericanos, diseñadores y constructores de grandes teatros en Filadelfia, Pittsburg, Baltimore, Washington y Atlanta. El proyecto para el teatro Bolívar fue expuesto en 1931 y se encargó su ejecución al arquitecto alemán residente en Quito, Augusto Ridder. El edificio, con una capacidad para 2,500 espectadores, se inauguró en 1933.

Se destaca el hall principal como espacio de transición entre la calle Espejo, posteriormente Peatonalizada, que hace de distribuidor funcional. A partir de éste se ubican los accesos a los locales comerciales laterales, al foyer del teatro y a las escaleras hacia el salón y restaurante Ubicados en la planta alta. Este gran hall se relaciona espacial y visualmente con los espacios de la planta alta gracias al conjunto de pilares de sección cuadrada que forman una el ipse de doble altura. La parte delantera del teatro se conforma en dos plantas: platea y galería, a las que se accede desde el foyer. Junto al escenario se ubican las baterías sanitarias, camerinos y bodegas. La volumetría del edilicio, un elemento horizontal compensado por un cuerpo vertical, es claramente de influencia art decó con detalles art nouveau. 

El interior del hall principal y los salones superiores tienen decoraciones de tendencia barroca; la amplia sala de cine es ricamente ornamentada, presentando dos espacios laterales de palcos. El edificio se levanta con una estructura de muros portantes de ladrillo. Los entrepisos y cubiertas se sustentan con rieles de hierro que ayudan a salvar las grandes luces que exigen estos espacios. Tanto en la fachada como en el interior, las ventanas y puertas de madera y vidrio muestran también decoración art nouveau y art decó. Los pisos, las escaleras y ciertos elementos decorativos son de madera de excelente factura, destacándose también el piso de mosaico del hall principal.

La calle Espejo adquiere una importante dinámica con la presencia del edificio, no solo en el ámbito formal sino como punto de atracción y concentración en este eje peatonal. Por más de siete décadas el edificio fue escenario de significativos eventos culturales y sociales, presentándose allí artistas y obras de fama mundial. Lamentablemente en 1999 un gran incendio devastó el edificio casi en su totalidad, desapareciendo con él una inmensa tradición cultural quiteña exactamente esto sucedió un domingo 8 de agosto de 1.999 y se produjo por una fuga de gas del local comercial de la planta baja del mismo edificio, ocupado por la multinacional Pizza Hut; el incendio consumió el 70% de todas las instalaciones. 

A pesar de los daños, se siguieron organizando eventos artísticos "sobre las ruinas" para recaudar fondos y recuperar este teatro legendario de la ciudad.
Su estilo arquitectónico Neoclásico armoniza el Centro Histórico de Quito. Sus líneas, de corte neoclásico, con algunos elementos arabescos, encantan a los quiteños desde los primeros pases de su construcción, ya que antiguamente la gente lo convirtió en un referente social, cultural y arquitectónico. Fue así como eventos de varios estilos y gran calidad visitaron el Bolívar: óperas, zarzuelas, ballet, conciertos sinfónicos, obras de teatro, variedades y otros.
Con el avance de los medios masivos de comunicación, especialmente en los años 80, el Teatro Bolívar dejó de ser visitado masivamente.

El teatro Bolívar es uno de los escenarios más importantes de Sudamérica por tal motivo se dan los exhaustivos procesos de recuperación por parte de los miembros de la Fundación Teatro Bolívar y el público del Bolívar.

Actualmente se ofrecen visitas guiadas por el teatro para descubrir su historia. El recorrido inicia en el hall principal del teatro en donde se puede evidenciar la magnitud del incendio, luego se ingresa a un segundo hall, el cual cumple con el objetivo principal de aislar al lugar en donde se realizan los diferentes eventos del ruido exterior, por este hall se tiene acceso a la planta baja del teatro, a la otrora luneta, a las salidas de escape y a los balcones. El museo está constituido por la lectura de sus espacios arquitectónicos, hall, salas, escenario, camerinos, escaleras, puertas, etc; y por una sala donde se exponen objetos utilizados en el Teatro Bolívar en sus inicios (proyectores, generadores eléctricos para los proyectores, cintas de celuloide, máquinas de escribir, entre otros)
El Teatro Bolívar forma parte del Patrimonio Cultural de Quito, por lo tanto debe ser salvaguardado de atentados como el incendio ocurrido en 1999 que no debe repetirse en ningún bien perteneciente al Patrimonio.




Museo Fray Francisco de Jesús Bolaños - Recoleta del Tejar




MUSEO FRAY FRANCISCO DE JESÚS BOLAÑOS-


RECOLETA DEL TEJAR



Ubicación 
Recoleta del Tejar

Horario de Atención
Martes a viernes de 10:00 / 18:00

Costo de ingreso 

Adultos: $ 1.00

Niños: 0.50
Luego de una recaudación pública y de numerosas limosnas, se pudo hacer la iglesia, dotando al convento de una considerable librería. Asimismo, fue posible contratar al pintor Francisco Albán para que ornase los muros con imágenes de la vida de San Pedro Nolasco.


El templo que data del siglo XVII es un sitio donde arcos de ladrillo y decorados con murales y retablos. Raúl Almeida, de la Agencia Metropolitana de Noticias, detalla la historia de esta edificación patrimonial ubicada en un popular barrio del Centro Histórico. 


El Municipio del Distrito Metropolitano de Quito entregó, a la comunidad de las hermanas Lauritas de El Tejar, a los padres mercedarios y a la comunidad de este populoso sector del Centro Histórico, la capilla San José de la Recoleta del El Tejar restaurada por el Fondo de Salvamento, FONSAL. La inversión fue de USD 200.000


En el acto se presentó el libro Historia del Arte en El Tejar de la Merced una obra realizada por la investigadora María Antonieta Vásquez y el historiador Alfonso Ortiz Crespo. El texto fue editado por el Municipio de Quito a través del Fonsal. 


El vicealcalde, Jorge Albán, indicó que Quito cuenta con capillas y conventos que forman parte de ese patrimonio que ha hecho de nuestra ciudad un ejemplo de conservación y es un atractivo para miles de turistas nacionales e internacionales. 

El Municipio está empeñado en establecer una alianza con todas las órdenes religiosas para mostrar los conventos y de esta forma la gente conozca sus archivos históricos, recorra las iglesias y mire, por ejemplo, los cuadros de Miguel de Santiago o los tallados de Caspicara, Goribar y otros grandes exponentes del arte religioso de Quito.
“Algunas iglesias se han convertido en sitios de exhibición para turistas dejando de lado la función religiosa para la que fueron construidos. Por eso, estos espacios deben ser mantenidos y respetados porque son parte de la vida de los quiteños y quiteñas”, agregó. 
Monseñor Ricardo Chamorro, de la orden de Los Mercedarios, indicó que en el sector El Tejar funcionaba en el siglo XVII las fábricas de ladrillos. Allí cientos de indígenas fabricaban tejas y ladrillos que se utilizaban para levantar el templo y el convento de La Merced.

La intervención del templo contempló la rehabilitación integral de la cubierta y pisos de la capilla, consolidación de las cabezas de muro, recuperación de los muros de adobe, pintura mural, pintura de caballete, escultura y maderas de los retablos.

Luego, el fraile Francisco de Jesús Bolaños llegó hasta el sitio donde hoy se encuentra la capilla de San José y dio inicio a la construcción de esta singular capilla, el convento para los frailes, la hospedería de La Ermita y posteriormente el cementerio de El Tejar.

Con la expulsión de los jesuitas, Francisco de Jesús Bolaños convirtió a este sitio en un centro de reflexión para religiosos de varias congregaciones, historiadores y filósofos. Se dice también que en un tiempo la Curia de Quito les quitó este convento y los frailes negociaron su devolución con un copón de oro.

Se instaló la cubierta provisional, desentejado de la nave principal, limpieza de las tejas y su impermeabilización, desinfección de crujías, preservación de la estructura de cubierta y anclaje de las cerchas. 

Espejo murió el 26 de diciembre de 1795 a los 48 años de edad, y en su testamento dejó escrita su voluntad de que el momento que fallezca sus restos sean enterrados en el cementerio de El Tejar.
A esto se sumó el retiro del cielo raso de carrizo, mantenimiento del sistema constructivo original de ala izquierda, consolidación de las cabezas de muro, resane de enlucidos, reparación de canales y bajantes de lluvias , mantenimiento de instalaciones eléctricas , recuperación de pisos y pintura de la edificación. La capilla de San José es muy importante para los quiteños y quiteñas no solo por sus belleza arquitectónica sino porque en la cripta interior de la Capilla de San José descansan los restos de Eugenio de Santacruz y Espejo, precursor de la Independencia y uno de los más ilustres quiteños que destacó en el campo del periodismo, la abogacía y la medicina. Fue bibliotecario.


domingo, 10 de mayo de 2015

Centro Cultural Benjamín Carrión


CENTRO CULTURAL BENJAMÍN CARRIÓN


  Ubicación
  Jorge Washington E2-42 y Ulpiano Paez 

  Horario de atención 
  Lunes a viernes 09:00 / 17:00

  Costo de ingreso 
  Entrada libre 

Abierto al público desde abril de 1994, el Centro Cultural Benjamín Carrión es un servicio cultural del Municipio Metropolitano de Quito y su Secretaría de Cultura, que viene desarrollando una sostenida actividad de difusión cultural y editorial, inspirada en los postulados centrales de Benjamín Carrión de cultura y libertad, atendiendo a la memoria social e histórica del país y a los retos contemporáneos de la diversidad y pluralidad de expresiones culturales, artísticas e intelectuales de la ciudadanía quiteña y ecuatoriana.

El Centro incentiva la investigación cultural con especial énfasis en la literatura y artes plásticas, divulgar fondos bibliográficos especializados en literatura y cultura ecuatoriana y difunde el archivo documental de Benjamín Carrión y de otros intelectuales. Además, brinda un espacio para actividades culturales y de promoción social y educativa, convoca a intelectuales, críticos y especialistas para la investigación de temas específicos y publica libros especializados que revalorizan a las figuras del quehacer cultural.
De estilo neocolonial, característica arquitectónica de las edificaciones de la época, la casa en la que vivió la familia Carrión Eguiguren en los años cuarenta y cincuenta del siglo XX está ubicada en el centro norte de Quito, barrio La Mariscal, en las calles Jorge Washington E2-42 y Ulpiano Páez, esquina. Por su importancia histórica y patrimonial fue restaurada y rehabilitada por el FONSAL a inicios de los noventa para que funcionara allí un centro cultural con los bienes más significativos que pertenecieron al maestro y que fueron entregados en comodato por sus herederos al Municipio Metropolitano. 

Su biblioteca particular, su archivo epistolar y documental, su colección de obras de arte y bienes muebles forman parte en la actualidad del Centro Cultural, con el objetivo de que sirvan junto a su auditorio, museo personal, nuevo acervo bibliográfico, salas de lectura, salas de exposiciones y eventos para una intensa actividad de difusión y promoción cultural que incluye expresiones multidisciplinarias, producción de exposiciones temporales, permanentes e itinerantes, presentaciones de libros, recitales, talleres, mesas redondas, ciclos de conferencias, investigación y producción editorial, atención de biblioteca especializada.




domingo, 3 de mayo de 2015

Panecillo


PANECILLO 



Ubicación 
Cerro Panecillo, Calle Palestina y Melchor de Aymerich 

Horario de atención 
Lunes a domingo  09:00 / 17:00

Costo de ingreso 
General $2,00


El museo del Panecillo expone imágenes de la historia de la construcción de la Virgen, además este lugar se ha convertido en uno de los miradores mas novedosos y bellos de nuestra ciudad, desde aqui podemos observar al centro histórico de Quito, la parte norte y sur de la ciudad. 

Su nombre fue otorgado por los españoles en su Conquista ya que la colina posee un parecido con un pequeño pan. La historia cuenta que antes de su llegada a esta loma la llamaban “Shungoloma”, palabra quichua que significa “loma del corazón”. De acuerdo a una leyenda, en tiempos pre-incaicos, miembros de la cultura Karas construyeron ahí un templo en honor al sol y uno en honor a la luna en San Juan, la loma levantada al costado opuesto. El general inca Rumiñahui habría destruido estos dos templos cuando sus tropas fueron forzadas a retroceder por el ejército español. Otro nombre con el cual se le denominaba en tiempos prehispánicos fue Yavirac.

El Panecillo es una elevación natural de 3000 metros sobre el nivel del mar, ubicado a un costado del Centro Histórico de Quito. Fue bautizada así debido a la semejanza que los españoles a su llegada le encontraron con los panecillos de comer, se erige en medio de la ciudad como un mirador desde el cual se aprecia la belleza andina de la zona y la disposición urbana de la ciudad. El Panecillo está coronado por una escultura gigante de aluminio de la Virgen de Quito.

La imagen principal de la cima es la Virgen de Legarda, una imponente escultura que se ve desde cualquier punto de la ciudad. El artista español Agustín de la Herrán Matorras en 1973, realizó en aluminio la escultura de la Virgen María que se encuentra en la cúspide del cerro, es una réplica de la escultura del escultor quiteño Bernardo de Legarda, la misma que reposa en el altar mayor de la iglesia de San Francisco.

La escultura esta compuesta de siete mil piezas diferentes, se construyo en el  año 1976, y es  considerada como la obra cumbre de la escultura de la escuela quiteña colonial.

Esta maravillosa obra reposa sobre un edificio base de cuatro niveles, construida en hormigón y revestida de piedra volcánica; en el interior se encuentra un pequeño museo en el que se relata la historia del milenario cerro y de la escultura. Además cuenta con un mirador ubicado en los pies de la Virgen, desde el cual se tiene una excelente  vista de la ciudad de Quito.

La loma de Panecillo mantiene aún el legado de la época incaica, porque allí se encuentra la Olla del Panecillo, una especie de cisterna circular de ocho metros de profundidad que fue utilizado para el riego de sembríos. 



Museo de la Merced


MUSEO DE LA MERCED



Ubicación
Calles Cuenca y Mejía

Horario de atención


A la Basílica de la Merced se entra por la plaza del mismo nombre. Y la mejor vista del templo se tiene desde ese lado: el gran lienzo blanco sobre el atrio de piedra la torre cuadrangular y sólida como fuerte, con aire arábigo en el cuerpo superior y remate; la cúpula central, airosa, y los cuatro cupulines con linterna sobre el lienzo. Conjunto personalísimo, de gran belleza.

La puerta de acceso tiene peculiar marco de piedra: pilastras de nichos superpuestos, capiteles con cabezas barbudas y encima del dintel el sol y la luna, tan caros para los canteros indios. Sólo en 1701 se pusieron los cimientos del actual templo, derruido el anterior, muy dañado por el terremoto de 1660. La torre se acabó en 1736, y en 1747 se hizo la dedicación de la iglesia.

El retablo del altar mayor se mandó a hacer por Bernardo de Legarda, en 1751. Lo mismo las tribunas del presbiterio que los cuatro doctores de la iglesia que adornan las pechinas de la cúpula, son obra del maestro Uriaco.

En el nicho central del altar mayor está la Virgen de las Mercedes, a la que Sucre rindió su espada vencedora en la Batalla de Pichincha. Es una estatua de piedra, de tamaño natural, estofada. Cuando las erupciones del Pichincha, los quiteños la sacaban en procesión.

Hay varias pinturas en la iglesia, las catorce estaciones del Vía Crucis, por la Judía Pinta, y varias pinturas por el Vencedor Mideros. El claustro principal de la iglesia de La Merced es uno de los mas atractivo en Quito, con pilares de piedra y deslumbrando por pasadisos blancos, así como un patio ancho de piedra que tiene una fuente tallada magnífica de piedra en el centro, con una figura de Neptuno. Hay varios rincón pintados en los pasillos del claustro. En el claustro superior hay una serie de pinturas que representan la vida de Sto. Francis Xavier, que fue pintado por el gran maestro jesuita, el Hermano Hernando de la Cruz.

En el claustro, uno puede entrar la biblioteca, que es uno de los lugares mas hermoso en el nuevo mundo, con sus dos pisos y sus paredes cubiertos con libros antiguos salta en el pergamino o con sus espinas dorsales cubierto en oro. El Museo deberá ser encontrado en el segundo claustro, junto con la célula del prioridad, decorado, aparentemente, por Manuel Samaniego. Hay también pinturas por Miguel de Santiago, Nicolás Gorábar, Bernardo Rodríguez y Manuel Samaniego, así como muchas joyas curiosas.

El Museo se encuentra en el segundo claustro y decorado aparentemente por Manuel Samaniego. Hay también pinturas de Miguel de Santiago, Nicolás GorIbar, Bernardo Rodríguez y Manuel Samaniego, así como muchas joyas curiosas.

Principales atractivos:

• Convento de La Merced: Al interior de Convento se admira el claustro principal. Así mismo se encuentran estupendas obras de la Escuela Quiteña, entre ellas la extensa serie de la vida de San Francisco Xavier y obras de Miguel de Santiago, Olmos, Albán, Pinto, Cadena entre otros.

• Altar: En el nicho central del altar mayor está la Virgen de las Mercedes, a la que Sucre rindió su espada vencedora en la Batalla de Pichincha. Es una estatua de piedra, de tamaño natural. Cuando ocurrío las erupciones del Pichincha, los quiteños la sacaban en procesión.

• Claustro Principal: El claustro principal de la iglesia es uno de los más atractivos de Quito, con pilares de piedra y fascinantes pasadizos blancos, así como un patio ancho que tiene una magnífica fuente tallada en piedra en el centro, con una figura de Neptuno. En el claustro superior hay una serie de pinturas que representan la vida de San Francis Xavier, que fue pintado por el Hermano Hernando de la Cruz.



Herbario Nacional


HERBARIO NACIONAL 



Ubicación


Horario de atención
Martes a viernes 08:00 / 5:00
Sábados 09:00 / 14:00

Costo de ingreso

El Herbario Nacional nace como el Departamento de Botánica del Museo Ecuatoriano de Ciencias Naturales (MECN) en 1977, año en que se conforma una colección de plantas mediante la entrega de duplicados de muestras colectadas por investigadores nacionales y extranjeros. Para el año 1978 se consolida su creación de la Sección Botánica del Museo Ecuatoriano de Ciencias Naturales (MECN) llamado también Herbario Nacional del Ecuador (QCNE)- y desde 1981 está registrado en el “Index Herbariorum” y es reconocido nacional e internacionalmente a través del acrónimo QCNE, que significan Q= Quito, C= Ciencias, N= Naturales, E= Ecuador.

En 1987 se inicia el procesamiento regular de muestras botánicas, año en que el Dr. Calaway Dodson, investigador del Jardín Botánico de Missouri (MO), asume la Dirección del Herbario Nacional. Posteriormente, en 1990 el Dr. David Neill del MO es designado Director Honorario, en este mismo año se suscribió el Proyecto Promoción Botánica (PROMOBOT) entre el Museo Ecuatoriano de Ciencias Naturales, Fundación Natura y el Jardín Botánico de Missouri. Esta iniciativa tenía como objetivo crear fondos de manejo administrativo y técnico del Herbario gracias a la compra de una parte de la deuda externa ecuatoriana, propiciada por el Missouri Botanical Garden con el control del Banco Central del Ecuador.

Durante todos estos años la Colección del Herbario Nacional creció notablemente, gracias a las contribuciones botánicas de investigadores como el Ing. Walter Palacios y Dr. Carlos Cerón (QCNE), Dr. Calaway Dodson, Dr. David Neill y Dr. Alwyn Gentry (MO), y Dr. Bradley Bennett (NY)  entre otros.

A partir del año 2009 hasta la actualidad, el Herbario Nacional del Ecuador (QCNE), es administrado técnica, científica y financieramente por el MECN.

En los últimos años siguen incrementándose las colecciones del QCNE, principalmente con muestras provenientes de sitios estratégicos y casi desconocidos, mediante la participación de sus curadores investigadores e investigadores asociados, en varios proyectos elaborados, gestionados y ejecutados por el MECN, como, Biodiversidad del Corredor Awacachi y Flora de Pavacachi en el 2005, Diagnóstico Bioecológico y Socioambiental de Áreas Naturales del Distrito Metropolitano de Quito entre  el año 2006 hasta el 2008, Efectos de la Aspersión del Glifosato sobre la Diversidad Biológica en la Zona Fronteriza con Colombia, desde 2008 hasta 2012, entre los más importantes.


Museo Ecuatoriano de Ciencias Naturales


MUSEO ECUATORIANO DE CIENCIAS NATURALES



Ubicación
Calle Rumipamba 341 y Av de los Shyris, interior del Parque la Carolina

Horario de atención
Lunes a viernes de 08:00 /13:00 - 13:45 / 16:45

Costo de ingreso
Adultos $2,00
Tercera edad y personas con capacidades especiales 50% descuento
Estudiantes $1,00
Niños $0,60

El Museo Ecuatoriano de Ciencias Naturales (MECN), organización gubernamental creada en 1978, tiene como objetivos inventariar, clasificar, conservar, exhibir y difundir el conocimiento sobre todas las especies naturales del país.  

El MECN es la única institución del Estado con la expertise y experiencia en temas de interés para la conservación de la diversidad. Razón por la cual trabajamos en forma conjunta con el Ministerio del Ambiente MAE en temas de esta índole. El  MECN ha sido reconocido como Autoridad Científica CITES. La institución cuenta con personal técnico especializado en Biología de la Conservación y en los principales grupos de la Biodiversidad (botánica, mamíferos, aves, anfibios y reptiles, peces, invertebrados), trabajando a tiempo completo en el cumplimiento de la misión institucional. El MECN ha trabajado a lo largo de sus años varios proyectos en los que ha desarrollado un gran conocimiento sobre las especies existentes en el país. También  ha sido un importante recurso para los centros educativos como refuerzo de los conocimientos impartidos en las clases académicas.